Una oportunidad crucial para establecer redes y para compartir y amplificar las voces de agricultores y agricultoras familiares en la acción climática.
Bonn, Alemania.- La comunidad internacional del clima se ha reunido en Bonn, Alemania, para las 60ª sesiones de los Órganos Subsidiarios de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC) entre el 3 y el 13 junio de 2024. Estas sesiones en Bonn son un momento clave a mitad de año y un preludio de lo que será la COP29 en Bakú, Azerbaiyán. En otras palabras, las conversaciones en Bonn preparan el terreno para las negociaciones críticas que se desarrollarán en Bakú. Por ello, estar en Bonn en junio es una oportunidad crucial para establecer redes y para compartir y amplificar las voces de las organizaciones de la agricultura familiar de todo el mundo.
En Bonn, el Foro Rural Mundial ha destacado la importancia de reconocer el rol catalizador de los agricultores y agricultoras familiares en la acción climática, la transformación de los sistemas alimentarios y la protección de la biodiversidad. Los agricultores y agricultoras familiares ya están implementando prácticas sostenibles en sus terrenos y granjas, y poseen tecnologías y conocimientos valiosos que pueden compartir con la comunidad internacional para moldear un futuro más sostenible.
“Las demandas y necesidades de las agricultoras y agricultores familiares deben ser escuchadas en los foros globales, asegurándoles un lugar en las mesas de negociación y toma de decisiones. Las políticas públicas, los Planes Nacionales de Adaptación (NAP, por sus siglas en inglés) y las Contribuciones Determinadas a nivel Nacional (NDCs, por sus siglas en inglés), entre otros, deben incluir la agricultura familiar. Para que esto sea realidad, se necesitan más y mejores fondos que financien la transición”, comenta Elena Aguayo, responsable de Políticas en el FRM, desde las reuniones en Bonn.
Actualmente, a nivel global, 439 millones de productores y productoras de pequeña escala invierten alrededor de 368 mil millones de dólares anuales en acciones de adaptación climática de su propio bolsillo, pero reciben solo el 0.3% de los fondos climáticos internacionales. A medida que comienzan las negociaciones sobre el nuevo objetivo financiero en Bonn, es crucial que los nuevos compromisos aumenten el acceso directo a estos fondos para las organizaciones de agricultores y agricultoras familiares.
Actividades clave en Bonn
Con la ciudad de Bonn llena de delegaciones de todo el mundo, el FRM llegaba para trabajar de forma coordinada con otras organizaciones de la agricultura familiar, entre ellas, Asian Farmers Association (AFA), miembro del FRM, también presente para buscar influir la agenda climática internacional.
Participamos activamente en las negociaciones oficiales sobre la iniciativa de agricultura y cambio climático de Sharm el-Sheikh y en la presentación de la Iniciativa Harmoniya, destacando el rol clave de las agricultoras y agricultores familiares en ella, mientras abogamos por más fondos en las discusiones sobre la Nueva meta colectiva cuantificable de financiamiento climático (NCQG, por sus siglas en inglés).
Estos días también incluyeron reuniones bilaterales con otras instituciones relevantes como el IICA o UN Foundation, cafés informales para establecer redes de contactos e incluso entrevistas con los canales oficiales de comunicación de ONU Cambio Climático en español, inglés y ruso.
¿Cómo seguimos?
La participación en Bonn es una etapa más de un proceso creciente, que nos llevará a la COP29 en Bakú, Azerbaiyán, y el año próximo a Belém, Brasil. La hoja de ruta del FRM hacia la COP30 contará con talleres y formación a las organizaciones de la agricultura familiar, acuerdos con múltiples instituciones para lograr datos que demuestren la importancia de nuestra posición común, seguimiento a negociaciones oficiales claves para la agricultura familiar (Sharm el-Sheikh, NAPs y NDCs, el Fondo de Pérdidas y Daños, o el NCQG entre otros) y generación de sinergias con las Presidencias de la COP29 y COP30 e iniciativas como FAO FAST o Harmoniya.
El FRM seguirá buscando asegurar que las demandas y necesidades de los agricultores y agricultoras familiares sean escuchadas y consideradas en las conversaciones sobre cambio climático y biodiversidad, abogando por políticas públicas adecuadas y una mayor asignación de fondos que lleguen directamente a las comunidades agrícolas en el terreno.